Nicolás Ayr demostró ser un tipo tímido y con pocas ganas de hablar, pero dentro de la cancha muestra otra actitud y se transforma en una fiera. Eso motivó a la directiva de Sporting Cristal contratarlo por la necesidad de un líder en la zona defensiva. Sin embargo, había que romper el hielo para arrancarle una sonrisa y no fue difícil, pues lo primero que le dijimos fue el parecido que tiene con el serbio Novak Djokovic. Y eso parece que le gustó.
Por Jimmy Pulido Alva
Nicolás, ¿te han dicho que tienes un “aire” al tenista Djokovic?
(Risas). La verdad que no. Me causa gracia, pero te diré que mirándome al espejo, a veces pienso que sí.
¿Así como le das al balón, también la conoces en el deporte blanco?
No seas malo. Djokovic es un grande del tenis. Lo mío es el fútbol. La verdad no sé nada de ese deporte.
¿Pero te gustaría practicarlo?
No lo sé, pero en algún momento lo haré. Es un desafío, pero debo ser sincero: no se agarrar una raqueta. Haría el ridículo, pero es cuestión de ver el momento indicado.
Djokovic gana dentro y fuera de la cancha. ¿También lo hiciste tú?
Noooo. Nada que ver. Soy casado y tengo dos nenes bellos. El mayor Valentino y la segunda una nena de tres semanas de nacida de nombre Abril, a quienes adoro mucho.
¿Te molesta que te comparen ahora con el serbio?
Jajaja. No, lo tomo con tranquilidad. Además ese tal Djokovic se parece a mí, yo no a él. Lo único es que ambos somos ganadores en el deporte que practicamos.
¿Tu paso por Colombia qué te dejó?
Muchas cosas positivas. Se practica el buen fútbol. Llegué a Tolima y luego al Huila, donde fui capitán.
¿Te adecuaste rápido al ambiente y su comida?
Sí. Se escucha mucho la salsa, cumbia y el vallenato. Ah, por si acaso me defiendo bailando y no tengo dos pies izquierdos; es más, coleccioné hartos CDs de los grupos, pero también escucho lo mío que es Fito Páez, Charly García, así como el grupo La Rotoca, muy conocido en La Plata, que toca cumbia argentina.
¿Y la comida?
El cebiche que preparan allá es regular, pero me dicen que acá en Perú es mejor, muy rico y que pica mucho porque le echan ají y que usan limón para darle sabor y se cocine el pescado.
¿Ya probaste el cebichito?
Todavía no. Mandé un e-mail a Ysrel Zúñiga y Juan Pajuelo, a quienes conocí en Estudiantes, para encontrarnos y comer ese plato típico de Perú. Seguro me responderán en estos días, ya que estamos ahora haciendo pretemporada y lo que se necesita acá es tener una buena dieta.
¿Te enfrentaste a Johan Fano?
Sí, en dos oportunidades cuando él estaba en Once Caldas. Es un delantero con gol y muy fuerte para anularlo. Hizo una buena campaña en Colombia y me parece bien que haya regresado porque lo quieren en ese país.
Los últimos años Cristal no tuvo suerte con fichar buenos zagueros...
Esta vez la cosa será diferente, pues en el campo verán lo que puedo mostrar. Tengo muchos objetivos por cumplir y uno de ellos es salir campeón con Cristal.
¿Meteras miedo en la defensa a los delanteros?
Haré mi trabajo, y si es necesario pondré la pierna fuerte. Llego al equipo para ser campeón, como te repito: mi deseo es dejar una buena imagen. No voy a defraudar, ya verán ustedes lo que rendiré. Lo bueno es que se armó un gran equipo.
