Óscar de Marcos se ganó el aplauso de la hinchada del Athletic de Bilbao en el estadio San Mamés que reconoció su esfuerzo al jugar casi una hora con una herida en el escroto.
De Marcos recibió una fuerte entrada de Javier Paredes, lateral izquierdo del Zaragoza, que le causó una profusa herida en la uretra distal y tres inciso-contusas en la región inguino-escrotal.
El jugador fue trasladado a la clínica San Sebastián en Bilbao donde permanece con una sonda tras haberle aplicado 25 puntos de sutura.
El bilbaíno demostró una gran entrega por su equipo, ya que tras sentir el golpe quiso continúar curándose solo con unas gasas.
De Marcos recibió una fuerte entrada de Javier Paredes, lateral izquierdo del Zaragoza, que le causó una profusa herida en la uretra distal y tres inciso-contusas en la región inguino-escrotal.
El jugador fue trasladado a la clínica San Sebastián en Bilbao donde permanece con una sonda tras haberle aplicado 25 puntos de sutura.
El bilbaíno demostró una gran entrega por su equipo, ya que tras sentir el golpe quiso continúar curándose solo con unas gasas.
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